domingo, noviembre 27, 2005

...Noto que es la primera vez que lo menciono


Así llegamos a Santiago y noto que es la primera vez que escribo su nombre.
Nuestra relación quedó para coronar mis reflexiones.
Durante mucho tiempo, para sentirme condescendiente con mi actuar como madre, me bastaba pensar en Santiago.
Su seguridad en sí mismo, su don de gentes, su capacidad de mando, me hacían sentir que lo había llevado por buen camino.
Me adjudicaba un lugar en sus logros; hasta llegué a tener cierta dependencia hacia él, al resolver mis asuntos.
Desde muy pequeño lo hice sentir importante al tomar sus opiniones en cuenta. Él respondió poniendo su mejor esfuerzo por actuar con madurez. Esto fue bueno para él, pero lógicamente, ocasionó cierta separación entre los hermanos, y esa brecha no se ha cerrado nunca.

Desde chiquito, tal vez tenía entonces diez años; cuando su padre y yo teníamos necesidad de viajar, él se quedaba a cargo del negocio familiar. No por preferencia, sino por actitud.
Su responsabilidad y carácter eran dignos de tomarse en cuenta. A esa edad ya sabía hacerse obedecer por sus hermanos y también por todos los empleados, a quienes dirigía con respeto, pero también con decisión. Todos nuestros empleados lo reconocen y quieren hasta la fecha.
Nuestra relación fue inmejorable por muchos años, me dejó sentir que estaba orgulloso de mí y yo se lo hice sentir a él.
Por mi parte, no sólo le quería como madre, también era el amigo que sin dudar elegiría, mi apoyo y mi consejero.
Eso sigue siendo importante para mí, tanto como el amarlo incondicionalmente por ser mi hijo.
Pero ahora debo preguntarme ¿Por qué escribo en tiempo pasado, acerca de mi identificación con Santiago?

37 comentarios:

Laura dijo...

La madre se identifica con Santiago. Yo diría, Santiago es un pedacito de su madre.

Bella persona Santiago.

Abrazos

Indianguman dijo...

Un príncipe, ese ninio. Ha de ser complicado, teniendo varios hijos, aceptar que los caracteres y las personalidades ejercen influencia, a parte de amarlos a todos por ser hijos, claro.

Felicitaciones!

J.S. Zolliker dijo...

Espíritu bello:
No sé porque no puedo más que opinar desde mi rss reader... en fin, aqui estamos.

Dicen por ahí, que los términos en pasado vienen a colación cuando se quiere retomar. O tal vez dicho por otro escritor: “(...) Y tendrás hijos que no sabrán nunca que eres mujer que sientes y padeces, sólo madre serás, su clara madre. Ignorarán las llagas de tu oído temeroso de oír noche tras noche, cuando se quedan la mujer y el hombre ante la eternidad en las tinieblas, una voz que no rima con tus pulsos, unas palabras que no sabrá nadie.(...)”

Un abrazo y buen fin de semana!

PD. la palabra de verificación que me ha pedido para el comentario, es "Hechizo"... ¿casualidad?... El texto es de GarciaSol.

Lety Ricardez dijo...

Querida Laura:
Si y no, porque, ¿Me creerías si te dijera que el hijo más parecido a Esther era Sebastian? Por eso estaba empeñada en cambiarlo, porque anticipaba sufrimientos y quería que aprendiera a defenderse. Pero eso tampoco es cierto, Raymundo el mayor, tenía, porque ahora va cambiando todos sus defectos magnificados y sin control, aquellos con los que ella más duramente luchó, el los consentía. Y Carlo su chiquito, aunque parezca que estuvo en contra de él, es su ternura, el que le tiene prometido dejarse querer toda la vida. Porque llega un momento en que los hijos ya no se dejan acariciar mucho y las manos tienen hambre.
Ya no sigo si no, te escribo un post aquí mi querida Laura

Lety Ricardez dijo...

Querida IndianGuman:
Siento que de manera inevitable nos vemos arrastrados además del amor, por la simpatía o empatía, porque los hijos son personas no sólo hijos.
Y este jovencito (escogí esa fotografía de mala calidad en los colores, pero buena porque refleja su formalidad a temprana edad) era así, como lo describe Esther, de manera natural se imponía hasta con el hermano mayor que le llevaba seis años. Pero los padres tienen obligación de ser prudentes
aún en esos casos y Esther no lo fue.
Te quiero Indian

Lety Ricardez dijo...

Querido José:
Quisiera hallar la palabra precisa para decirle lo que siento al oirme llamar espíritu bello por usted.
Es un regalo, un regalo enorme, que me hace feliz y un nudo en la garganta. Que Dios le bendiga por esa felicidad que me regala.
Amo a todas las amigas que me acompañan, pero los caballeros que visitan este blog, son la joya mayor de esta corona, porque esto está escrito para todos, no para todas, pues todos tenemos madres, hermanas, esposas, hijas, y creo que es bueno saber lo que piensan y sienten y por qué hacen lo que hacen. Así que lograr su presencia es adquirir una joya, porque es un caballero,cierto, pero muy especialmente, porque es usted a quien admiro y respeto.
No es casualidad la palabra de verificación, acuérdese que Oaxaca es mágico y mil gracias por el texto, corro a encontrarlo en un buscador, no sin antes dejarle un beso en la frente.

fgiucich dijo...

Por lo que uno puede observar a su alrrededor o, bien, si la objetividad le permite mirar en la familia nuclear, existe siempre una elección natural de los padres hacia alguno de sus hijos; no porque quiera menos a los otros, simplemente porque ese hijo es el que representa cabalmente la proyección en él. Y creo, sin temor a equivocamerte, que este tipo de situaciones se vé mucho más en familia numerosas. Querida amiga, una nueva muestra de un exacto análisis. Abrazos.

Anónimo dijo...

Letyyyyy, esto lo publicas en España y te meten al bote por hacer trabajar a un niño de diez añoooos!!!
Jaja, un beso,Lety.
(Yo en tercera remesa de trabajos de los 'grandes', a la espera de lo gordo, gordo que me viene entre la semana que empieza y la otra). Lo bueno es que luego tengo unos díitas libres (6 y 8 de diciembre son fiesta), y luego ya...queda menos para la Navidad. Así que ando en un último esfuercito y adelantando.

J.S. Zolliker dijo...

Espíritu Bello:
Gracias por sus comentarios en mi artículo. Y del sobrenombre, no agradezca nada que es algo que muy raramente hago; aunque nunca me equivoco. Recibo el beso en la frente y envío un cariñoso abrazo.
Saludos!

Pato.M. dijo...

Me sentiría profundamente feliz con una madre como tí.

Orfa dijo...

Yo opino que Pato Meneses está bonito.

Orfa dijo...

Pero no era lo que iba a opinar, ash. Bueno, Lety, yo decía que qué bendición tienen los padres que tienen hijos responsables. Depende más de los hijos que de los padres, ¿no? O no sé, mis papás son lo máximo y nosotros no somos muy responsables que digamos, y tengo un tío borracho y desobligado con hijos ejemplares, trabajadores y demás. En fin.
¡Muchos besos, Lety!

Lo-que-serA dijo...

Mi Lety. Paso de carrerita a dejarte un beso y a seguir, curiosa e intrigada, las reflexiones de Esther.

Lety Ricardez dijo...

Don Fernando: Esperaba su reflexivo comentario, estas mujeres no saben estar sin el. Y si, creo que tiene razón, no se trata de cuestión de favorecer sino de reflejarse, pero aún así, creo que Esther pudo haber matizado esto. Fue difícil contentar después a los menos favorecidos en ese sentido. Le dejo con gran afecto ese beso en la frente.

Ay querida Gabriela, pues yo acabo de salir de los trabajos forzados del Encuentro, que dicho sea de paso floreció, a pesar de algunos inconvenientes, así que todo valió la pena.
Te extrañaba en verdad, así que me siento feliz de tu regreso, procuremos que no me lean mucho por allá, pero que conste que no eran trabajos forzados, era un chico excepcional, con sus defectos como todos, pero ya hablaremos de eso.
Te abrazo con amor

Lety Ricardez dijo...

Ahora si José, prometo que me pongo al corriente en mis links y subo el suyo sin más demoras, porque esa visita ya no me la pierdo. Con las de usted estoy de lo más feliz. Lo abrazo con afecto creciente.

Ay Pato, que ya eres feliz es algo que se adivina, porque tienes una cara de hombre sano que se ilumina desde dentro. claro que un hijo como tú es un tesoro que acojo desde luego. Gracias por ser como eres y también por volver. Con cariño

Lety Ricardez dijo...

Yo creo que Pato opina lo mismo de Orfa, bueno, eso digo yo. Pues ya ves, Esther gustaba de adjudicarse méritos en la actitud de Santiago, pienso que si se estimulan las buenas actitudes, las personas se esmeran en hacer aquello que le brinda reconocimientos, pero ya existe una semilla que sólo se está ayudando a germinar, y algunas veces germina aún sin demasiados cuidados, como en el que caso que mencionas. Te dejo muchos abrazos y todo mi cariño.

Mi querida La que es:
Me da gusto que me digas que vienes intrigada por estas reflexiones, porque tú conocías mucho de este texto y eso quiere decir que ha cambiado un poco. Luego te escribo para lo de tu hermano, porque acabo de leer tu mensaje, pero estoy contenta porque si hay espacio.
Mil besos para tí

noname dijo...

Al fin puedo leerte y escribir, he estado como loca durante el fin de semana, sabes querida Lety que leerte se me ha vuelto un vicio :D de los buenos eso si, durante mi trabajo estos días sólo pensaba en que será de esta Esther? Y como estaba sin posibilidad de acceder a un pc, adivina lo primero que hice hoy tomando desayuno ;)
Un besote.

Lety Ricardez dijo...

Hola Pepi, me regalas una sonrisa matinal aquí en tu casa, mucho más tardía para tí. Me alegro y me preocupo por tus palabras, porque Esther termina ya de contarnos acerca de sus hijos, en breves días hará su aparición Carmen y esa si me sacará "canas verdes" ojalá pueda alcanzar comprensión a sus cuitas. Ojalá que si, mientras eso llega, te abrazo con enorme afecto, querida amiga.

Silencio dijo...

Wow hermanos muy diferentes, pero la brecha no debería existir, el domingo que he desayunado con los mios, diablos, la brecha casi se ha cerrado con ellos, es cierto que ellos se llevan mejor, pero así es esto si no hay variedad no hay tanta diversión y bueno con el tiempo esas brechas se abren, pero tambien se cierran.

Lety Ricardez dijo...

Hola Silencio:
Pues si, son muy diferentes como dices amigo, pero en la diversidad está la riqueza y mira, este texto tiene su tiempo de escrito, afortunadamente ahora las convergencias son mayores y se llevan muy bien, unos más que otros eso sí. Me alegra mucho saber que tú tienes buena relación con tus hermanos,estar con ellos debe ser agradable para ti. Te dejo mi abrazo cariñoso como siempre

Enigma dijo...

Quiza porque han cambiado las cosas como cambia la vida aunque en escencia se es igual.

Saludos

El Enigma
Nox atra cava circumvolat umbra

Lety Ricardez dijo...

Querido Enigma, acierta usted, han cambiado las cosas, porque la vida es cambio y no siempre mejor. Pero nada está estático y asi como vienen los malos tiempos, vuelven los buenos, todo es un fluir constante y todo se debe asumir.
Un abrazo para usted

Natho47 dijo...

me trajiste muchos recuerdos a mi memoria

senorakravitz dijo...

hay Lety! yo estoy profundamente enamorada de mi hijo...y siento que soy una leona y que lo voy a ser hasta que tenga barba. Voy a ser una madre insoportable.

Lety Ricardez dijo...

Hola mi nuevo amigo, el nombre el plural me cuesta un poco aplicacionistas bienvenido a esta tu casa, ya estuve por tu blog, dejando un mensajito.
Saludos cordiales

Señora Kravitz, pues imagíneses a esta mi Esther con cuatro galanes y además su marido, se ha sentido siempre como una reina ¡pero sabe que no será siempre este disfrute!
Me alegro muchísimo de tenerla aquí, en verdad le tengo mucha simpatía. Le dejo aquí un abrazo enorme.

Anónimo dijo...

Dos personas hermosas por dentro y por fuera, a juzgar por lo que escribes... ¿Por qué en pasado? Creo que la respuesta a esa pregunta sólo puede estar dentro de ti.

Un fuerte abrazo.

Hannah

Lety Ricardez dijo...

Querida Annah, gracias por venir y gracias por tus palabras también, pues si hasta ahora la respuesta estaba dentro de mí, pero a partir de mañana será de todos, como lo son los textos de todas mi mujeres, Esther está por concluir sus confidencias, después vendrá Carmen,

tyare dijo...

Los hijos son individuos únicos, aún teniendo la mísma sangre y siendo criados del mísmo modo, ellos adoptan actitudes y personalidades propias. Santiago es un chico admirado por su madre por la entereza que demostró desde pequeño, eran complices , amigo-dependientes, ahora que esta grande ¿Qué pasó con ese vínculo???? Sigue allí??! Besos.

Lety Ricardez dijo...

Querida Tyare:
Esther nos contará mañana lo que sucedió con Santiago, el amor no desaparece, pero las personas cambian un poco y la identificación o simpatía, no viene implícita con el paquete filial, es algo que los hijos y los padres se ganan día con día.
Te dejo muchos besos

Mary Carmen San Vicente dijo...

Lety, vine a dejar constancia de mi "mientras" porque quiero leer los últimos dos que llevo atrasados con el ojo bien abierto. Mañana a primera hora vengo ya sin el edredón marcado en las mejillas a darte mi comentario mientras tanto te dejo un abrazoooootototote !

Lety Ricardez dijo...

Querida MariCarmen, lo que me da gusto es que te hayas dado esa escapadita. Un descanso nos sienta bien, aunque luego hay que llegar a descansar de las vacaciones. Besos para ti y gracias por venir ahora para avisarme. Besos a montones

Mary Carmen San Vicente dijo...

Me imagino que Santiago fue como alguna vez me referí a mi hermano, "El odioso niño bueno", ese que crea esos celitos entre hermanos porque todo lo hace bien. Después creces y te conviertes en padre y sabes que irremediablemente en cada familia se necesita un Santiago.

Te sigo de cerca Lety, como siempre con el corazón en la mano y esa paz que me queda siempre que termino de leerte.

Un beso grande !

Lety Ricardez dijo...

Pues si MariCarmen exactamente eso fue Santiago, pero esta Esther pudo haber hecho mejor las cosas, para matizar esa situación, pero no, gozando en esa relación, lo puso de manifiesto. Y mira ahora el Santiago ya no es tan lindo como era, bastante orgulloso se ha vuelto, pero ya te lo dirá Esther, ya está arriba.
Miles de besos para tí

Anónimo dijo...

Querida Lety, me place comentarte que creo que esta vez resuelvo en menos días y con menos horas de trabajo, así que estaré por acá leyendo a tus mujeres. Un besote muy cariñoso.

Lety Ricardez dijo...

Querida Gabriela:

Otra vez tenía perdido este comentario, pero ya te encontré arriba y estoy feliz. Gracias por venir contra viento y marea. Besos

Anónimo dijo...

que fuerza la de Santiago, asumir la responsabilidad de crecer para tocar el corazón rojo de su madre, que sin duda lo ama profundamente, y hoy se sorprende de dejarlo ser..saludos Michelle

Lety Ricardez dijo...

El día en que aparece un nuevo amigo es día de fiesta. Gracias por aparecer Michelle ojalá Santiago te invite a volver por acá. Bienvenida y voy a conocerte a tí.
Tiendo la mano en amistad.

Gracias por leerme, tú das razón de ser a este blog