domingo, junio 10, 2007

Antes odié las restricciones. Ahora se que mi estatura creció con ellas


Antes odié las restricciones de mi padre y madrina. Ahora se que mi estatura creció con ellas.

Mis hermanos no cambiaron. A su edad, siguen gustando del consentimiento. De ahí las consecuencias para ellos. Antes brillaban, verlos hoy estremece.

Ya casada, los padrinos perdidos, y ellos adolescentes, tuve valor y pretendí ayudarlos, pero ¿acaso has visto semejante desfachatez? ¿Que hijo puede —sin meterse en problemas— cuestionar el hacer de quien lo trajo al mundo?

Lo único que logré, fue la ruptura con mi madre y por ende con todos mis hermanos.

Fui acusada de todo y no intento defenderme. La verdad, tan bien como yo la sé, la saben ellos. Sólo necesito decir que el amor por mi familia ardió y se consumió a sí mismo.

Digo esto aquí para liberarme, aunque nada de lo vivido, justifica el habitar mis días desde el resentimiento.

Consentirlo me impide llegar a la plenitud de madurez, y me destruye.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

Que cambio amiga mia¡¡¡me ha encantado el color y las im{agenes...esto hablara de una nueva etapa?...SErá que el viento ha despejado el alma y ella florece???...ahí estaré para ser TESTIGO...

Viv. dijo...

Aunque un dedo acusador venga del pasado a señalarnos, existieron personas que nos dieron la oportunidad de caminar un paso adelante de las culpas. A veces son personas con las que no nos une un lazo de sangre pero que mejor que nadie han sabido dejar un pedacito de si mismas en nosotros.
A mi me encantan tus vuelos, hasta el próximo, Lety!

Francisca Westphal dijo...

también he roto con mi padre... tal vez algún día te cuente... besotes

Miguel Schweiz dijo...

Vaya Lety... qué cambio... pensé que me había equivocado de blog. Jo, es que el otro me gustaba mucho porque tenía como ese aire a México, tan hermoso. De todas formas éste es bonito también.

Ya veo que estás modificando demasiadas cosas en tu vida. Quizás lo importante en estos momentos sea tener paciencia y esperar a que las cosas se vayan dando poco a poco. Y no creo que haya nada que pueda destruirte si sigues tus principios, sin dejarte influenciar por el pasado. Total ya quedó atrás...

Eso es lo que pienso, pero sólo por una pequeña intuición, no me hagas caso. Siento en ti tanto coraje y fuerza que no permitirán ninguna caída, sólo pequeños resbalones... Al menos así lo espero mi queridísima amiga.

Un fuerte abrazo

Gonzalo Villar Bordones dijo...

muy fuerte, de una mujer fuerte.

AnaR dijo...

Siempre que regresa el pasado con sus sombras sentimos, creo, en igual medida el resentimiento como la culpabilidad.Por los pasos que no se dieron , o por los hubiera que se quedaron en el vento. Y es que la familia siempre nos duele de por vida , cuando se rompe.

Un beso, Lety.Von la misma luz que has dejado en el nuevo vestido de tu blog.

fgiucich dijo...

En sociedades estructuralmente machistas, rebelarse en la forma que tú lo hiciste, significa un acto de arrojo admirable. Y ello, te permite contárnoslo con una sencillez que conmueve. Abrazos.

Conciencia Personal dijo...

Profunda sabiduría la tuya, Lety, solo la universidad de la vida te la puede dar.

Besos, Monique

princess olie dijo...

¡Qué linda está tu casa!
Pero la sincera reflexión que haces, estremece... ¿qué decir, si lo dices todo? Tal vez, que muchas enseñanzas sacaste de ello y lo demuestras en el día a día.

Cariños y gracias por tu visita,
querida amiga:

olie

Pablo dijo...

Lety, me gustó el cambio de colores de tu casa. Que lo que venga por delante esté lleno de los mismos colores de tus letras. Pablo.

alejandra dijo...

siempre los cambios son buenos buenisimos y el tuyo pinta para serlo... los colores me gustan más que los pasados es es un hecho...


te dejo besos regados por ahi...


te sigo leyendo

Anónimo dijo...

Hola querida Lety, cuanta sabiduría, no sé que más decirte, toda mi admiración y cariño.
Un abrazo.

ka! dijo...

Señora Na´Leticia:

Tus pasos, tus días, tu inmenso cariño por quienes quieres..

¿sabes? es un honor ser tu sobrino el mal portado, el leerte me hace sentirme bañado de tu experiencia...gracias...de veras gracias.

abrazo..

Marce Mercado dijo...

Preciosa, deje ir la culpa y la rabia...
ya?
que por eso se enferma...

Besos desde el sur

Marce

Gonzalo Villar Bordones dijo...

te imagino llena de atardeceres.

Nidesca dijo...

hoy me provoca abrazarte y decirte: "mi niña, ya está bien, hiciste lo que pudiste en su momento, ahora déjalo ir y vive a plenitud la belleza que hace brillar tu alma"

ya sabes que te quiero Lety, y sí, estos blogs van de exorcismos y desnudeces, sino para qué escribir.

me encanta tu nuevo look, tan trigo, tan sol, tan vida...

abrazo enorme

^_^

Laura dijo...

Lety querida:
se nota que es tiempo de cambios para todos, de magia - como la que hace unos dias me inunda-. Bellísima tu casa. Es señal de crecimiento, de cambio, de alma henchida de sabiduría.
Te dejo mi cariño de siempre.

Jean Georges dijo...

Casco duro recubriendo mi cerebro, que no dejó -no deja- de estrellarse con las paredes más cercanas. Y se hunde. Y luego voy por ahí, mostrando como un idiota orgulloso los trofeos de las peleas conmigo mismo. Algunas sirvieron, muchas. Y esos centímetros de los que usted habla, Madre-Lety, se acumulan en la frente, desde la ceja a la base del cabello. "Esa es tu altura", como decía Aramís desde su metro sesenta. Y vivió sus días con la espada casi desenfundada, porque a la vuelta de la esquina podría tener una batalla por el honor, por esos valores morales que sólo él -sólo él?- creía primordiales.

Salud Madre-Lety. El regreso siempre está esperando, a veces las ideas no lo acompañan.

Anónimo dijo...

Espíritu bello, has sido invitada a jugar "El juego" en mi blog.

Araceli Gallardo Peña dijo...

NO sé si este sea un escrito de antaño también; pero si aún no han restablecido la relación con tu madre y hermanos,que sé que es algo que te duele en lo profundo de tu ser; como bien dices saben la verdad tanto como tú y sé que eso es lo que te ha mantenido fuerte, la verdad de tu lado. Y la verdad tiene la costumbre de siempre ponerse de pie.
Un abrazo fuerte y grande.

Erika Contreras dijo...

Hace dias que no pasaba por aquí y me sorprendió gratamente el nuevo formato de tu blog. Espero que sea el reflejo de tu flexibilidad al cambio, porque cambiar es crecer.
saludos
erika

Mariluz Barrera González dijo...

Las familias son extrañas por naturaleza, pero lo mejor es que siempre en nosotros llevamos algo de ellas... somos ellas y aunque nuestros familiares no lo quieran reconocer somos parte de ellos siempre.

Besos.

Lo-que-serA dijo...

Lety, mi Lety. Después del huracán llego a tu hermosa casa tan cambiada. Espero hacer lo mismo, contigo, allá en tu terraza y contarte, contarte... que las restricciones nos alcanzan, donde sea que vayamos y que nos crecen, en efecto, no crecen.
Te dejo un abrazo cariñoso.

Gracias por leerme, tú das razón de ser a este blog